La Universidad de Alcalá pertenece a la Red Española de Universidades Saludables y la Red Madrileña de Universidades Saludables, redes que se establecieron para promover la salud en el ámbito de la universidad. En este aspecto tienen un peso importante la alimentación y la sostenibilidad (comportamiento sostenible), entre otros muchos componentes donde las cafeterías y comedores universitarios juegan un papel clave.
Entrevistamos a Myriam Ortega, coordinadora de la Oficina Ecocampus de la Universidad para saber qué actividades se llevan a cabo dentro de este marco promotor de la salud y cómo podría avanzarse en la sostenibilidad de los comedores universitarios.
¿Cuáles son los criterios que convierten a un comedor universitario en sostenible?
Hay que hacer hincapié, lo primero, en los trabajadores de la propia cafetería. Lo ideal en los comedores universitarios sería comenzar por comprar productos de proximidad, sostenibles, que se comprase a granel para evitar tanto envase, etc., pero no se hace para reducir costes, esto se debe a varias cosas, muchas veces la falta de información (pues la compra a granel es, en general, más barata) o que los empresarios están muy sujetos a los precios que marca la universidad. Opino que es más definitoria la falta de información… porque los costes podrían compensarse de algún modo. Por otro lado, también hay que dedicar esfuerzos a enseñar a los estudiantes, que son los principales usuarios, a que aprendan a valorar una dieta sostenible, que sepan lo que están comiendo y comprendan la importancia de comer algo bueno, limpio y justo. El resultado final debería ser saludable y bueno, apetecible, realizado con procedimientos que respeten criterios de justicia, de proximidad y estacionalidad, y respetuoso con el medio ambiente.
¿Qué iniciativas se llevan a cabo en la Universidad en esta dirección?
Tratamos de concienciar a la gente sobre lo importante que es comer bien. Aquí en la Universidad de Alcalá celebramos el Terra Madre Day para tratar de concienciar a las personas sobre lo importante que es recuperar los lazos con la tierra, compaginándolo con el gusto. Pero la realidad es que es difícil llevarlo a la práctica, en la Universidad los estudiantes comen rápido, por ejemplo pueden estar todo el día en la biblioteca, salir y comer un sándwich rápido y se meterse a estudiar otra vez. Para concienciar a los usuarios de la cafetería podrían llevarse a cabo iniciativas tan sencillas como poner en los mantelitos de las bandejas información sobre lo que se está comiendo, de dónde ha venido, cómo se hace y cuáles son sus propiedades.
Otra actividad que hacemos es convocar un concurso para el diseño de carteles que promuevan la salud de una manera integral, y ahí no solo el tema alimentario es protagonista, pero aún nos queda pendiente colocar los carteles ganadores en los espacios de cafetería
¿Debería ser la sostenibilidad un criterio de peso a la hora de dar las concesiones de las cafeterías?
Si, por supuesto. Lo que pasa que para ello también haría falta un poquito de educación a nivel de gestión. Aquí cuando salen los pliegos para el concurso nos dejan introducir algunos criterios y puntuar positivamente, entre otras cosas, el que haya alimentos ecológicos, pero tendría que tener un peso más importante. Si realmente se fuera consciente, a todos los niveles, de la importancia de una alimentación correcta, todo cambiaría radicalmente. Y más aún, si se fuera consciente de la importancia de trasmitir ese conocimiento.
¿Por qué es la Universidad un buen espacio para este tipo de experiencias?
La fase universitaria es muy importante porque es cuando se definen los hábitos. Los jóvenes se empiezan a independizar y tienen que saber cómo organizarse, etc. Yo creo que es una fase clave en la que se empiezan a establecer las propias ideas, en la que ya no se es tan dependiente de lo que diga la familia, se comienza a pasar mucho tiempo fuera de casa y es importante saber cómo organizarse la vida, y entre otras cosas, la comida, los hábitos alimentarios, son fundamentales.
La UAH es una universidad promotora de la salud, ¿por qué lo es? ¿Qué iniciativas y proyectos lleva a cabo?
Parte de la idea que comentamos de que la fase universitaria es clave para promover la salud. A partir de ahí, se han creado varias redes de trabajo: una Red Madrileña de Universidades Saludables, en la que hay tanto universidades públicas como privadas, y otra Red Estatal de Universidades Saludables, que integra tanto universidades como administraciones de salud.
A través de estas redes se promueven muchas actividades, casi todas ellas destinadas a la divulgación a través de campañas informativas. Por ejemplo ponemos carteles en todos los ascensores diciendo cuantas calorías quemas si subes andando en vez de en ascensor, y los beneficios que tendría este pequeño ejercicio para corazón. También llevamos un sistema de alquiler y préstamo de bicicletas para promover su uso. Poco a poco estas iniciativas se van convirtiendo en hábitos.